mI NOMBRE ES mIREN O NO MIREN. 

Innevitablemente, siempre he tenido las ideas claras. 

Las marchas interminables por el campo con mi familia, La Doctora Queen y Bailando con Lobos hicieron mella en mí.

Cuando era pequeña tenía una Barbie y no hacía sino desvestirla para ver su bañador.

La moda era para mí un imán y las texturas, fuese del papel de baño o de los pendientes de mi abuela, eran inquietantes para mí. Tocar y mirar, Mirar y tocar y Miren o No Miren, adivinaba la composición de los tejidos al tocarlos. 

Estaba claro, debía cursar la diplomatura de diseño de moda y una vez acabé realicé patronaje, escaparatismo y y y y y todo aquello que me hiciese crecer en mi carrera de diseñadora. 

Ahora soy jefa de esta tribu CheyenNne que espera satisfacer tus demandas y tus deseos.